Comenzaba el buen tiempo. Las tardes eran cada vez más largas y en los días de lluvia, al escampar, ya olía a primavera. Una intensa actividad de gira de conciertos, donde los tiempos se miden por las pruebas de sonido, montaje, actuaciones y viajes con horarios justos nos hacía valorar cada vez más los ratitos donde disfrutas de un atardecer, un paseo por el campo, una visita a un monumento.
Estaba decidido, no podíamos esperar más. teníamos un nuevo disco que grabar desde hacía mucho tiempo pero no encontrábamos el momento ni la calma necesaria para ponernos manos a la obra. De modo que alquilamos una casa aislada en el campo para encerrarnos allí durante quince días. La idea era llevarnos los equipos de grabación y los instrumentos y estar encerrados hasta que terminásemos las grabaciones que se estaban postergando.
Y entonces ocurrió lo inesperado: marzo de 2020. La Pandemia.
Como si el destino se burlara de nosotros, íbamos a estar sin salir, pero en casa. Obviamente, el plan “A” no pudo hacerse. No obstante, la nueva situación proporcionaba casi en su totalidad las condiciones que buscábamos para la grabación que teníamos entre manos. Con la agenda vacía de conciertos, ya que los planes de la gira 2020 se iban desmoronando como un castillo de naipes, no hizo falta buscar tiempo al tiempo para iniciar las grabaciones de las nuevas canciones y de los cuentos. La Pequeña Juglaresa, el nuevo disco empezaba a ser una realidad.
Este trabajo está pensado para escuchar en familia, con cuentos y músicas que gusten a pequeños y grandes. Es algo que nos gusta mucho hacer, para que el Arte sea un bien del que se pueda disfrutar en compañía y al alcance de todos. La aventura musical de la Pequeña Juglaresa es un viaje imaginario por la Edad Media, sin las fronteras que marcan los siglos o las páginas de historia de los libros. Por tanto, la Juglaresa conoce a personajes de distintas épocas, pero todos importantes, porque todos le enseñan qué es la música, cómo se hace, para qué sirve y cómo disfrutar de ella.
De esta forma, nuestra protagonista visita el Alcázar de Sevilla, donde conoce a los músicos de Alfonso X, que le enseñarán cómo se escribe la música, las notas musicales. También conocerá a la princesa Wallada, en Al Andalus, para tocar ritmos con panderos y darboukas. En un monasterio, descubre la Musicoterapia, una ciencia inventada para curar con música. Y más tarde a Francesco Landini, cuando aún era un niño, pero con habilidades musicales increíbles para su edad.
Teníamos estas historias escritas antes de la Pandemia. El disco continuaba su ritmo de grabación, pero seguían apareciendo nuevas ideas, inspiradas por los acontecimientos que estábamos viviendo. En la segunda parte del disco aparece entonces una sección más seria, pero que también es un aprendizaje y una realidad que acompañó a los músicos de otros tiempos: los miedos, la enfermedad o el terror a la muerte.
No se asusten porque a nuestra protagonista no le pasa nada malo y el final será feliz. Pero sí vive el momento de las epidemias medievales. Afortunadamente conoce a una trovadora, La Dama de la Torre, donde se refugia con ella en su castillo durante el tiempo que dura la calamidad y mientras tanto, aprende música. Y no os cuento más para no desvelar el final de esta aventura musical.
Un doble álbum con un total de 12 piezas musicales y 10 cuentos para disfrutar de historias y músicas medievales: danzas, saltarellos, música de trovadores… interpretadas con un amplísimo abanico de instrumentos: violas, arpa, zanfona, clavisimbalum, organetto, viola de teclas, guitarra medieval… Hemos utilizado más de 40 instrumentos en las grabaciones, ofreciendo así la posibilidad de conocer una amplia diversidad de timbres sonoros. En los cuentos aparecen personajes reales, incluso hemos incorporado situaciones y frases mencionadas en las crónicas de sus vidas. Son en definitiva, relatos para aprender música y la historia que habitaron estos músicos.
¡Esperamos que disfrutéis de esta aventura musical!